viernes, 10 de junio de 2011

Nos adoctrinan sin que seamos conscientes: la ideología ‘progre’ que vende la televisión

Un libro-entrevista a responsables de la industria televisiva de Hollywood destapa el uso sectarista que hacen para la agenda izquierdista con las series del ‘prime time’. En España también hay ejemplos de esa manipulación.

La industria de la televisión en manos de la izquierda sabe utilizar como nadie el potencial de la pequeña pantalla para difundir su propia ideología. De esta manera, la agenda izquierdista se ve favorecida para poder vender a través de la televisión su ideología ‘progre’ yadoctrinarnos sin que seamos conscientes.

Esto, que los estadounidenses consideraban hasta ahora un secreto a voces en relación a la industria televisiva de Hollywood, se ha mostrado como una realidad al publicarse un libro-entrevista a 39 productores de televisión en el que confiesan su propio sectarismo al usar las series del ‘prime time’ para la agenda de la izquierda.

Con el libro Prime Time Propaganda, escrito por el joven columnista Ben Shapiro, la polémica está servida. Shapiro se ganó la confianza de los productores que entrevistó y plasmó en su libro una serie de controvertidas declaraciones que muestran la manipulación que de la televisión hace la izquierda en Estados Unidos.

Sin embargo, este tipo de manipulación ideológica no es exclusiva de los Estados Unidos. En España también hay ejemplos de cómo la televisión vende un determinado tipo de ideología de izquierdas en la que el homosexualismo político está muy presente.

Conservadores “idiotas”

Shapiro, que estudio Derecho en Harvard, ha conseguido demostrar con su libro, que tendrá una difusión máxima porque será publicado por una editorial filial de HarperCollins, que esos productores excluyen sistemáticamente a todo aquel que no sea progresista. Además, ha difundido algunas de esas grabaciones a través de Internet

Entre las confesiones más explícitas, se puede mencionar, por ejemplo, la de Marta Kauffman, co-creadora de Friends. Kauffman explica que cuando en la serie puso a la hermanastra del líder conservador Newt Gingrich casando a una pareja de lesbianas, fue "para j... a la derecha". Y reconoce que selecciona el staff de la serie para que sean "mayoritariamente progresistas".

Susan Harris, creadora de dos series míticas de los setenta (Enredo) y de los ochenta (Las chicas de oro), tan geniales en el humor como disolventes en el mensaje moral, considera que los críticos de televisión conservadores son "idiotas" y tienen "mentes medievales". Y añade una frase significativa: "Al menos, pusimos a Barack Obama donde está".

Y Leonard Goldberg, productor de Los Ángeles de Charlie o Starsky y Hutch, afirma que la izquierda "es 100% dominante en Hollywood, y quien lo niegue está negando la verdad". Shapiro le pregunta a Goldberg si la política es una barrera de entrada: "absolutamente", responde.

Fred Pierce, presidente de la ABC en los años ochenta, reconoce que quien sea conservador tiene poco futuro en la televisión. Quien no sea de izquierdas, "no asciende, se queda en el subsuelo", dice.

David Shore, creador de House, es aún más sincero: "En esta ciudad se asume que todo el mundo es de izquierdas. Si alguien es de derechas es mirado como con horror, y de lo que estoy seguro es de que eso no les ayuda".

Influir sobre la juventud

Una opinión que resume este estilo de producir televisión es la de Doug Herzog, presidente de MTV, quien ve su trabajo como el de alguien que tiene "superpoderes" para influir sobre la juventud.

Y es de eso de lo que se trata en última instancia, de utilizar el ‘prime time’ para crear una sociedad al gusto del establishment progresista. Aunque un gran número de estadounidenses son conscientes de ello, nunca nadie había conseguido reunir tantas confesiones juntas sobre esta tendencia, hasta que llegó Ben Shapiro.

También pasa en España

Lo que está sucediendo en Estados Unidos con la manipulación de los medios no es exclusivo de ese país. En España también se dan numerosos ejemplos de manipulación informativa para fomentar una determinada ideología de izquierdas.

En ese sentido, el ‘maridaje’ entre la política de izquierdas, la prensa rosa y el homosexualismo político está a la orden del día. Así lo pudimos comprobar hace tan sólo dos meses en la boda del diputado socialista en el Parlamento catalán Jaume Collboni, jefe de la campaña electoral de José Montilla en las pasadas elecciones autonómicas, con Óscar Cornejo, creador de programas de telebasura tan populares y transgresores como ‘La Noria’, ‘Sálvame’ o ‘Aquí hay tomate’.

A ese enlace asistieron entre otros el propio Montilla, Miquel Iceta, viceprimer secretario del Partido Socialista en Cataluña, reconocido homosexual, José Zaragoza, secretario de organización de los socialistas catalanes; y personajes tan variopintos procedentes de la televisión más transgresora como Jordi González, presentador de ‘La Noria’ (Telecinco), Jorge Javier Vázquez, presentador de ‘Sálvame’ (Antena 3), o los tertulianos Belén Esteban, Mila Ximénez o Karmele Marchante.

Cabe recordar que un buen número de cadenas de televisión en España tienen en sus parrillas de programación series de televisión o programas del corazón que venden una determinada ideología progresista. Es difícil contemplar esas imágenes sin que aparezcan en el guión referencias a relaciones íntimas hetero u homosexuales, entre jóvenes, en ocasiones muy jóvenes, o cualquier otra trama transgresora.

Un buen ejemplo de esa tendencia es la serie ‘Física o química’, donde una serie de jóvenes viven todas esas experiencias y más en el ficticio instituto Zurbarán.

Otro ejemplo es el de la serie de ficción española en torno a los vampiros ‘Ángel o demonio’, que en el capítulo de la semana pasada incluía una escena en que una de las protagonistas, para no perder los beneficios de la fresca juventud, a pesar de ser septuagenaria, se acaba acostando sexualmente con su hijo. Los excesos argumentales de esta serie incluyen la petición de esta vampira a su hijo, que gestiona un geriátrico, de que envenene a un anciano a su cargo con una inyección tóxica.

En relación a todo ello, un reciente informe del Observatorio de Contenidos Televisivos Audiovisuales (OCTA) denunciaba al respecto que los horarios protegidos para los niños en televisión no son más que una falacia, ya que se incumplen constantemente.

En esos horarios protegidos se cuelan sin problemas algunas de esas series o programas como los que hemos mencionado anteriormente, entre ellos también ‘El diario’ de Antena 3. ‘Tonterías las justas’ (Cuatro) o ‘Crimenes imperfectos’ (La Sexta), aparecen asimismo en la lista de programas ‘progres’ que incumplen el horario infantil.

Otro ejemplo lo tenemos en Cataluña, donde en junio de 2010 la serie ‘La Riera’, producida por la televisión catalana y emitida en TV3, dependiente de la Generalitat de Cataluña entonces gobernada por el Tripartito, emitía un capítulo en el que ‘inventaba’ sacerdotes que aconsejaban relaciones sexuales prematrimoniales.

El planteamiento de este capítulo de la serie estaba manipulado para defender como normales y corrientes posturas progresistas ajenas totalmente a la Doctrina católica.

ForumLibertas.com

“Indignados”, luces y sombras de sus propuestas: la representación política y las finanzas

Su propuesta de cambio de la ley electoral con un distrito electoral único y listas abiertas, ¿es viable? Quieren prohibir los rescates bancarios y las inyecciones de capital, y dejar caer a los bancos con problemas o nacionalizarlos, es decir ‘politizarlos’

Los ‘indignados’ del 15-M se resisten a abandonar sus acampadas y protestas en la calle y han protagonizado en las últimas horas sendas actuaciones reivindicativas ante el Congreso de los Diputados y en Valencia, con motivo de la constitución de las Cortes Valencianas de esta legislatura.

En el Congreso, cerca de 1.000 manifestantes mostraban este miércoles, 8 de junio, durante seis horas su rechazo a la reforma de la negociación colectiva, convocados a través de las redes sociales. “O pasamos o acampamos”, amenazaron, mientras unos 50 furgones policiales vigilaban su avance a sólo 20 metros del edificio.

Finalmente, al filo de las dos de la madrugada, los ‘indignados’ decidieron marcharse. “Una retirada a tiempo es una victoria”, cantaban mientras se alejaban del Congreso, muchos de ellos en dirección a la cercana acampada de Sol.

Horas después, una manifestación de unos 400 jóvenes ‘indignados’ expresaban sus protestas ante las Cortes Valencianas mientras la Policía cargaba contra ellos al considerar ‘ilegal’ la concentración, protagonizando enfrentamientos que se han saldado con cinco detenidos y varios heridos.

Así, todo apunta a que este movimiento va a seguir mostrando en la calle su desacuerdo con el actual sistema y con la situación de crisis económica que tiene a casi uno de cada dos jóvenes en las filas del paro.

Pero, ¿qué propuestas concretas hacen los acampados en sus asambleas para cambiar las cosas?, ¿qué hay realmente de constructivo en las iniciativas que proponen estos jóvenes y qué de perjudicial? Veamos en ésta y sucesivas informaciones las luces y sombras de las propuestas de los ‘indignados’ del 11-M.

Ante esta cuestión, hay que considerar que tan equivocado puede resultar un rechazo en bloque a sus iniciativas, porque tengan algunos de ellos o las propias acampadas un determinado aspecto que no guste, como una aceptación en bloque por el simple hecho de mostrar su indignación contra ciertas injusticias sociales. Como en otras cuestiones, la política es también una práctica de racionalidad.

Dos primeras cuestiones a analizar, considerando si son viables o no, son los planteamientos que hacen de cambio de la ley electoral para regenerar la política en España; y su visión de la actual situación de las finanzas.

Distrito electoral único, vía equivocada

Para una regeneración de la política estatal y autonómica, los ‘indignados’ proponen cambiar la ley electoral para acabar con el bipartidismo PSOE y PP, y también que haya unacircunscripción única para toda España y listas abiertas.

Sin embargo, proponer un distrito electoral único para toda España, con la proporcionalidad entre votos y escaños, es favorecer de una manera extrema el bipartidismo, porque aquellos que obtendrían mayor acumulación de votos serían los que se presentan en todas las circunscripciones, y esto hoy por hoy está en manos del PSOE y del PP.

Evidentemente, con el sistema que sugieren sí mejoraría la representación de Izquierda Unida, por ejemplo, pero empeoraría la representación de aquellos partidos que tienen un ámbito autonómico concreto. De esta manera, el sistema político estaría jugando a favor de una ‘recentralización’.

Es decir, la UPN desaparecería, Coalición Canaria prácticamente igual, lo mismo que el PAR. Por su parte, el PNV quedaría reducido a la mínima expresión, y CiU pasaría de ser la tercera fuerza a ser la cuarta o la quinta.

La cuestión es que este sistema no mejoraría la representación del Parlamento, sino que aleja todavía más al diputado del ciudadano.

Listas abiertas no, desbloqueadas

Los manifestantes piden que se impongan las listas abiertas, pero su concepto de listas abiertas parece algo confuso y, entre otras cosas, es en realidad un sistema que prácticamente no se utiliza en ningún país porque es tremendamente complicado.

Lista abierta significa que, en un momento dado, se pueden cruzar nombres de una candidatura con otra, y esto es posible en circunscripciones pequeñas donde hay un buen conocimiento de los candidatos, pero ligar la circunscripción única para toda España con listas abiertas es una propuesta poco viable. Habría que preguntarse cómo un señor de Cáceres, por ejemplo, sabe si el número 7 de tal o cual lista le conviene o no.

En realidad se refieren a listas desbloqueadas, en las que el elector marca la preferencia sobre aquella lista, no mezcla listas. En una lista abierta se pueden mezclar, en listas desbloqueadas se puede cambiar el orden en que está la lista y este sistema tiene más utilidad.

¿Cuál sería pues la respuesta correcta? Si el problema es la articulación del elector con el diputado, que es un problema que tenemos porque el diputado está lejos del elector, no lo alejemos más.

La forma de acercarlo es con distritos unipersonales, en los que aparece un diputado, el diputado del distrito. Con esta fórmula se tienen garantías de que la gente sabe a quién dirigirse, a quién reclamar y con quién hablar; y el diputado sabe de quién depende.

¿Problema? Este es un sistema mayoritaria puro y no tiene ninguna proporcionalidad. Además la Constitución exige la proporcionalidad.

¿Solución? El modelo alemán: el ciudadano tiene dos votos. Más o menos el 50% de la Cámara está elegida por circunscripciones personales y el otro 50% por una lista, de manera que el ciudadano puede votar a un partido de una lista y al candidato de su circunscripción, que puede ser de otro partido si esa es su preferencia.

El peligro de politizar las finanzas

Por otra parte, en el ámbito de las finanzas, los ‘indignados’ piden que no se rescate a los bancos, algo que tiene cierto sentido, aunque también presentan algunas contradicciones sus propuestas, tal como analizaban diversos expertos en una información publicada por el diario El Mundo el pasado 29 de mayo.

Su petición de que se prohíban los rescates bancarios y las inyecciones de capital (o, en todo caso, que se sometan a referéndum), contrasta con otra propuesta que hacen en la que instan a que las entidades con problemas puedan ser nacionalizadas, como ya ha sucedido en el pasado en países como Reino Unido, Irlanda o Suecia. Así, sería el Estado el que tiene que afrontar las obligaciones con los impositores y acreedores del banco en cuestión.

Sin embargo, una vez nacionalizada la entidad, se habla de constituir una banca pública con control social. Pero, ¿qué significa esto?, ¿quién ejercerá ese control? Precisamente, uno de los problemas actuales de las cajas de ahorros está generado por el control público que se ejerce sobre ellas y la imposición a las entidades de operaciones sin interés financiero, pero sí político o social.

Al mismo tiempo, muchas de las conclusiones de las asambleas de los manifestantes en el terreno económico insisten en dejar caer a los bancos que tienen problemas y son incapaces de solucionarlos, una tesis defendida por ejemplo por analistas económicos tan prestigiosos como el español Xavier Sala i Martín, profesor en la Universidad de Columbia, o por el Nobel de Economía en 2001, el estadounidense Joseph Stiglitz.

Josu de la Varga

¿Existe una genética generacional?: los ‘cachorros’ de Mayo del 68 son los que hoy más votan a la izquierda

El barómetro del CIS apunta a que en España hay un ADN ideológico que acompaña a los diferentes grupos de edad dependiendo de lo vivido en sus años de desarrollo ideológico. Las revueltas de finales de la década de los 60 y sus protagonistas lo demuestran

La franja de edad que va de los 55 a los 64 años son más de izquierdas comparativamente con el resto de grupos de edad de los electores españoles. Es una conclusión que se extrae de las cifras que ofrece el barómetro del CIS del mes de abril que analiza en uno de sus apartados la intención de voto y simpatía política por grupos de edad.¿Por qué esta anomalía estadística?

La realidad es que los españoles que tienen entre 55 y 64 años en intención de voto de cara a las próximas elecciones generales elegiría en un 24,9% al PSOE mientras que su grupo antecesor (los españoles de 45 a 54 años) en un 22,2% y el posterior (los votantes de 65 o más años) en un 23,8%.

Esa tendencia ideológica hacia la izquierda también se refleja en la intención de voto que afecta a Izquierda Unida, el grupo de edad de 55 a 64 años votaría en un 5,9% a la formación comunista frente al 4,8% del grupo de 35 a 44 años y el 0,8% del grupo de 65 años o más.

La misma lectura se puede aplicar en la intención de voto a la derecha política, en este caso hay una contracción en este grupo de edad que votaría en un 25,9% al PP mientras que los votantes de 45 a 54 años votarían en un 26,6% a los populares y los ciudadanos de 65 años o más en un 33,6%.

El grupo más de izquierdas

De hecho el grupo de edad de entre 55 y 64 años se sitúa ideológicamente más a la izquierda que todas las demás franjas de edad, incluso las más jóvenes. La misma encuesta revela que este grupo de población es la que más simpatiza con los valores de la izquierda.

El barómetro del CIS pregunta a los encuestados, al margen de su intención de voto, “¿por cuál de los siguientes partidos siente usted más simpatía o cuál considera más cercano a sus propias ideas?”. En este caso el 34,1% de los encuestados del grupo de edad de entre 55 y 64 años se sienten cercanos ideológicamente al PSOE mientras que 65 años o más están en sintonía con los socialistas en un 23,8% y los siguientes grupos de edades prosiguen así: 45-54 años en un 22,2%, 35-44 años en un 18,1%, 25-34 años en un 17,7% y 18-24 años en un 16%.

De hecho la simpatía por el PSOE de este grupo de edad llega al 34,1%, muy por encima de la media de simpatías que levanta la formación de izquierdas, un 25,55. También está por debajo de la media de simpatías que despierta el PP (30%) con un 25,9% de simpatías hacia esta formación.

La influencia de Mayo del 68

¿Existe una genética generacional? ¿Hay un ADN ideológico que acompaña a los diferentes grupos de edad dependiendo de lo vivido en sus años de desarrollo ideológico? Lo cierto es que el grupo de edad de entre 55 a 64 años corresponde a la generación que vivió las revueltas de Mayo del 68 y sus consecuencias.

Por ello Mayo del 68 sigue actuando en la intención de voto: los ‘cachorros’ de aquellas revueltas son ahora los españoles más de izquierdas.

Los ‘hijos’ ideológicos de este episodio señalado de enfrentamientos entre ciudadanía y poder son precisamente los que conservan en su esencia generacional la tendencia política liberal y ajustada a la izquierda que alimentó aquellas revueltas.

Si realizamos la operación de mirar cuantos años tenían en el 1968 el grupo de edad más de izquierdas del panorama electoral español resulta que estamos hablando de esa generación.

En mayo de 1968 comenzaron las revueltas, pero su germen ideológico se extendió en la década de los 70. El votante español que ahora tiene 64 años tenía en el 68 21 y el que suma en la actualidad 55 tenía entonces 12. Teniendo en cuenta que Mayo del 68 tan sólo supuso el inicio, es evidente que el crecimiento de esas generaciones se desarrolló en un contexto profundamente condicionado por los ideales de aquellos movimientos que encontraron el periodo álgido de sus efectos en los años 73 y 74. Curiosamente aquel poso pervive en el ADN generacional.

Juan Francisco Jiménez Jacinto